Tenemos en nuestras manos una herramienta super potente, la mente.
Una herramienta con infinitas posibilidades, capaz de lo mejor y de lo peor, según el uso que le demos.
Es la responsable de la realidad que vivimos cada uno de nosotros. Por ello más vale que le prestemos un poco de atención y hagamos por entenderla y empezar a llevarnos bien con ella.
Hace tiempo me vengo preguntando porque hay veces que paso días de mierda, haciendo exactamente lo mismo, con las mismas personas y en las mismas circunstancias, en las que otras veces soy capaz de disfrutar cómo un enano.
La respuesta: mi mente.
He podido reconocer que no se trata tanto de qué es lo que haces sino cómo lo haces, tu estado interno (tu nivel de conciencia) en ese momento.
Déjame que empiece por el tipo de relación que la mayoría de las personas solemos tener con nuestra mente.
Después trataré de que compruebes por ti mismo que esto puede cambiar y cómo hacerlo.
Tabla de contenidos
La mente como tu peor enemigo
La mente en cualquiera de nosotros, cómo centro de operación independiente y actuando por sí misma, se puede convertir en un arma de destrucción masiva, para nosotros mismos y para los demás. Clic para tuitearSólo hay que echar un vistazo a la cantidad de barbaries que somos capaces de cometer las personas: violencia de género, asesinatos, peleas, guerras, desastres ecológicos…
Y respecto a nosotros mismos, simplemente fíjate con la cantidad de estrés, ansiedad, nerviosismo o apatía que vivimos la gran mayoría de personas en nuestro día a día.
Encerrados muy a menudo en nuestros “problemas” y preocupaciones, sin ser capaces de escapar, de ver más allá.
Llegando a veces a situaciones límites cómo autolesionarse o el suicidio.
¿Sabes porqué? Porque estamos dominados por nuestra mente.
La mente en sí no es mala, ni mucho menos, es una herramienta increíble pero hay que saber usarla, o mejor dicho, no dejar que ella te use a ti Clic para tuitearLa mente trabajando al servicio de sí misma y de forma autónoma, es claramente disfuncional y capaz de hacer cosas horribles.
¿Cuántas veces has sentido que tu cabeza te va a explotar? ¿Que no puedes más, que no te soportas a ti mismo?
¿Con que frecuencia te sientes agobiado, aprisionado por pensamientos negativos que no paran de dar vueltas por la pasarela de tu mente una y otra vez y que no te aportan nada?
Alguna vez habrás podido comprobar en tus propias carnes que tu mente es capaz de consumir toda tu energía y hacer que te sientas exhausto, mucho más que si llevaras 3 horas haciendo footing sin parar.
Si pudieras decidir, ¿realmente decidirías tener esos pensamientos? Creo que no, nadie lo elegiría conscientemente, nadie en su pleno juicio decidiría infringirse sufrimiento a sí mismo.
El problema reside en que creemos que somos nuestra mente, nos identificamos con ella.
Esto hace que cualquier pensamiento que pasa por allí lo agarramos cómo nuestro y creemos que somos eso.
El pensamiento se vuelve compulsivo cuando buscamos en él nuestro sentido de identidad Clic para tuitearTu mente cuando actúa de forma independiente, no para de recordarte aquellas cosas que no te van del todo cómo a ti te gustaría y las sensaciones muy a menudo son insoportables.
Nos hacemos un daño terrible a nosotros mismos.
Nos volvemos esclavos de nuestra mente.
En vez de usarla, ella nos usa a nosotros.
Déjame que te diga que hay solución pero la solución no está en la mente, está mas allá de la misma.
Debes despertar tu conciencia para poder reconocer quién y qué eres realmente.
Tú no eres tu mente, no eres tus pensamientos ni tus emociones, eres mucho más que eso.
Eres algo mucho más vasto y extenso. Una inteligencia mucho mayor.
La mente como tu mejor aliado
Cuando despiertas y pones tu mente al servicio de lo que realmente eres, llámalo esencia, Ser, consciencia (da igual, son sólo palabras que señalan hacía algo mucho más profundo que no se puede definir conceptualmente), la mente se convierte en tu fiel servidor y eres capaz de conseguir cosas increíbles.
Empiezas a sentirte dueño de tu propia vida, coges el mando y dejas de ser una marioneta sin rumbo.
Ya no es tu mente la que te usa a su antojo, eres tú el que usa al instrumento.
Es una sensación de libertad y bienestar tremenda.
Para ello es necesario empezar a tomar distancia, separarte un poco y observar cómo funciona y todos los pensamientos que pasan por ella.
Sólo así podrás ponerte de pie en tu vida y crear la realidad que tú decidas.
Para aumentar tu nivel de conciencia y empezar a dejar de ser esclavo de tu mente y vivir más libre, puedes empezar a dar el primer paso ahora mismo.
Estas son algunas herramientas que yo uso:
- Trata de observar tus pensamientos.
No los juzgues, no los critiques, no luches contra ellos. Simplemente estate ahí cómo observador y presta atención a todos los pensamientos que pasan por tu cabeza, cómo si estuvieras sentado viendo pasar nubes.
Empieza a observar la voz que habla dentro de tu cabeza.
Observando tus pensamientos vas cogiendo distancia con ellos, poco a poco te vas dando cuenta que tú no eres eso, dejas de identificarte con ellos.
Es el principio del fin del pensamiento compulsivo e involuntario.
- Presta atención a tu respiración.
La respiración es algo que ocurre en tu cuerpo normalmente de manera automática e inconsciente.
Otra forma de salir de la corriente de pensamientos es llevando atención/consciencia a tu propia respiración.
De esta manera, al focalizar la atención en la respiración, la retiras de tu mente y retomas el contacto contigo mismo, con tu presencia.
Simplemente, cada vez que te des cuenta que estás inmerso en un torrente de pensamientos repetitivos y automáticos, haz lo siguiente: para, respira hondo y trae la atención a tu respiración.
Haz 3 o 4 respiraciones profundas y verás cómo tu mente se va aquietando poco a poco.
Hagas lo que hagas, trata de estar allí, de estar concentrado en lo que estás haciendo, de ser uno con la situación, con el momento presente.
Si estás manteniendo una conversación con un amigo, estás jugando al tenis o haciendo la comida, dedica plena atención a lo que estás haciendo en ese momento, dale toda la importancia al momento presente.
Por supuesto, es necesario dedicar tiempo a planificar tu día o semana. Pero una vez hayas decidido que es lo que vas a hacer, en lo que decidas estar, estate.
Conclusiones
He intentado hacerte ver el potencial que tenemos en nuestra mente para decidir la vida que queremos llevar, para crear tu propia realidad.
Todo depende el uso que le des a la misma o mejor dicho, si eres tú el que usa tu mente o es ella la que te usa a ti.
Te he mostrado también herramientas o técnicas que a mí me funcionan para poco a poco, ir alejándome del torrente incesante de pensamientos, que tanto daño nos hace e ir cogiendo las riendas de mi mente y de mi vida.
Te aseguro que si yo puedo, tú también puedes.
Es cuestión de práctica y paciencia.
De hecho, siempre he sido una persona muy inquieta y nerviosa, hasta el punto que de pequeño los profesores pensaban que era hiperactivo.
Tengo una mente muy traviesa y rebelde, que en muchas ocasiones me ha jugado y me sigue jugando malas pasadas y me lleva por un camino que no es el que yo quiero seguir pero ahora me he dado cuenta que poco a poco eso se puede cambiar.
Ten paciencia, no tengas prisa, no desesperes.
América no se conquistó en un día.
Tu mente lleva toda la vida campando a sus anchas y haciendo lo que le da la gana.
No trates de domesticar a un caballo salvaje en 15 minutos.
Tranquilo, todo lleva su tiempo, pero las recompensas son infinitas.
Cuando por ejemplo, eres capaz de reconocer un pensamiento negativo y te das cuenta que no tienes la obligación de seguirlo, que tú no eres eso y que puedes dejarlo ir, va perdiendo su fuerza y en consecuencia el poder de hacerte daño.
Cuando empiezas a notar las primeras mejorías y ves que el torrente incesante de pensamientos se acalla un poco (aunque sólo sea unos segundos) y simplemente estás presente, es una sensación de liberación y paz tremenda, que vas incorporando poco a poco a tu vida, a tu día a día.
A medida que vas avanzando y profundizando, vas sintiendo una sensación de libertad espectacular.
Ahora cada vez más, eres TÚ el que decide.
¡¡Te animo a que pruebes y me cuentes tus experiencias!!
¡Ahora te toca a tí!
¿Te has parado alguna vez a escucharte, a ser consciente de esa voz que no para de hablar constantemente dentro de tu cabeza?
¿Sientes que a veces esa voz te juega malas pasadas y consume tu energía?
He compartido contigo herramientas que yo uso para aquietar la mente pero estoy seguro de que hay muchas más, ¿qué otras herramientas usas tú?
¡Deja tu comentario y cuéntanoslo!
Espero de corazón que lo que te he contado te sirva y con la práctica empieces a ver resultados.
¡Un abrazote enorme!
Yo suelo ponerme música relajante, para dejar de oír a mi mente y o meditaciones… a veces tb uso la respiración
Hola Eva,
Totalmente de acuerdo, son 3 herramientas muy buenas para calmar nuestra mente y volver a recuperar un estado de serenidad, de conexión con nuestro ser.
¡Mil gracias por compartirlas con nosotros!
Un fuerte abrazo
Hola muchas gracias por vuestro compartir es muy bueno, yo utilizo la meditación variada pasiva y activa, respiración, música, tocar el piano, componer, tareas de casa, dar clases y recibirlas, deporte.
Hola Jesús Ángel,
Coincido contigo en muchas de las ideas que comentas.
En mi día a día, la meditación, la respiración conectada y el deporte, son 3 de mis pilares fundamentales para mantener la serenidad y calmar mi mente.
¡Mil gracias por tu aportación!
Un abrazote grande
Hola muchas gracias por tú aportación a éste mundo tan necesitado, abrazos sinceros amigo, cuidate mucho, ciao
Mil gracias por tus palabras Jesús!
Seguimos caminando y compartiendo compañero.
Un fuerte abrazo.
Hola
Muchas gracias por compartir, me es de mucha ayuda en este proceso de salir de la ansiedad que me aqueja por mucho tiempo la mente me domina .
La experiencia que comparte es una luz de esperanza y sin duda eres un ser de luz😇
La pondré en práctica desde hoy mismo .
Gracias😊
Un abrazo
Hola Flor!
La ansiedad es un claro síntoma de que la mente se ha adueñado de nuestra vida.
Me alegra mucho escuchar tus palabras y espero que realmente te sirva lo que he compartido para ir calmando tu mente y cambiando esa ansiedad por paz interior.
Como bien dices, ese es el secreto, no quedarse solo en la lectura y pasar a la práctica.
Te mando un fuerte abrazo y gracias por compartir tu opinión!
Hola Jose, te agradezco todo lo que compartes, me ayuda a comprender muchos momentos difíciles por los que he atravesado en mi larga vida, 70 años.
Viví una infancia feliz, luego las estructuras de la sociedad me fueron “tironeando” , era una época muy conservadora que se pensaba más en el qué dirán que en la felicidad. Estuve de novia, me casé (hace 50 años) y tuvimos tres hijos, hoy casados con hijos, disfruto de una linda Familia.
Sigo aprendiendo con tus relatos y consejos.
Dios te Bendiga
Me encantó! muy buen articulo, el confinamiento me trajo hasta este camino del despertar, ya que la mente tuvo tiempo de hacer de las suyas y no de daba cuenta, simplemente estaba como en “piloto automatico”.
Y claramente este camino no es fácil, no es simple, lleva esfuerzo, cuando nos hacemos cargo de nosotros, tambien nos sumamos mas responsabilidades, comence con mi conciencia planetaria, reciclar, compostar, y reutilizar, hacerme cargo de mi en este planeta, consumir concientemente, claramente estamos acostumbrados a vivir de esa manera, que es fácil, usar descartables, tirar y comprar de nuevo, cortar con ese circulo vicioso nos lleva a cambios de habitos, y nuestra mente vuelve a jugar de las suyas.
Y si bien tenemos mas responsabilidades como humanos, tenemos una mayor satisfaccion, un brillo en el corazon, ser sincero con uno mismo, con su ser interior, es algo que no puedes comprar con dinero, y solo viviendolo y experimentandolo puedes comprenderlo.
Muchas gracias por estos bellos articulos!
Hola buen día, yo estoy iniciando a controlar mi mente y es difícil pero sé q podre lograrlo. Cuando es demasiado me enfoco en mi respiración, leo páginas de algún libro o incluso aprovecho la ocasión para ver algún curso de aprendizaje en de acuerdo a mi necesidad laboral.
Hola buenas noches, yo quería comentar por lo que estoi pasando ahora mismo. Me dio un bajón repentino sin ningún motivo, no tengo ninguna preocupación soi feliz. Pero llevo unas semanas que siento que no soi yo que actúo por pura rutina, y me siento desmotivada por cosas que suelo hacer de diario, siento que no tengo ganas de hacer nada nada me motiva, tengo la cabeza que nose ni donde la tengo, e perdido como alegria y yo soi todo lo contrario. Y me vienen todo el rato pensamientos que no quiero tener y que no los pienso y me angustio mas, tengo algún momento que estoi mejor pero me dura poco solo cuando voi a dormir es cuando me relajo pero en cuanto empiezo el día ya me agobio. Y al final preocupo a todo el mundo porque no entiendo porque me a pasado esto de repente y me encuentro así. Stoi súper ida no tengo la cabeza donde la tengo que tener.Como que mi cabeza no me deja planear un día de las cosas que solía hacer. De estar activa en todo momento. Y me da muchísimo miedo pero muchísimo de la cabeza que haya frenado y no me deje avanzar. Hago cosas pero creo que no las hago como yo quisiera como si fuera por pura rutina. Y ya no se que pensar. E perdido como toda motivación por todo. Y no quiero seguir así. Nose que hacer ya. Es como que mi cabeza me dice que no haga nada. Gracias.